viernes, 14 de febrero de 2014

100%

Si ayer hablaba de la responsabilidad al 50%, que la sumisa posee en la relación, hoy nombraré el 100% de la responsabilidad para consigo misma y para con su sentir.

Nunca una sumisa debe traicionarse a sí misma, y ante todo, a cerca de su sentir.
El sentimiento de entrega que se siente hacia un Dominante, no es baladí, ni efímero, ni volátil.
Es lo suficientemente fuerte como para que a penas pase por el cerebro y se analice.
Porque lo que se siente en la entrega, no se puede analizar, porque como no tiene fin, te puedes perder en ello, y obviar lo más importante: vivirlo.

Una vez comienzas a andar por la senda de este camino, dejas de analizar los "porqué" a cerca de lo que sientes.
Y de vez en cuando caes de nuevo en el análisis vainillista y pragmático. Y te pierdes, seguramente abducida por un punto de inseguridad que aún habita en ti, y los penamientos se suceden rápidamente y uno tras de otro, sin cesar, cayendo en una barrena cada vez más fuerte, y fuerte, y fuerte.....'STOP'!!!!!
Ahí, debes frenar el desborde de la emoción, respiras y dejas ir. Lo dejas ir todo, lo pensado, lo analizado, lo repetido y vuelves a ti: a tu sentir de sumisa.
Y cuando tu cabeza vuelva a querer analizar, te vuelves a refugiar en el sentimiento de entrega, de admiración, de respeto.

Porque es lo que me salvará de la locura sin sentido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario